Quienes somos, Quienes somos, Maria Jose Arranz Gil

Nuestra historia: Más de 300 años de tradición familiar

Bodegas Peñafalcón tiene sus raíces en una larga tradición familiar que se remonta al siglo XVII. Los antepasados de los actuales propietarios ya elaboraban vino en los antiguos lagares de la región.

La pasión por la viticultura ha sido transmitida de generación en generación, y en el año 2000, Casimiro Marcos decidió dar el paso de elaborar y comercializar sus vinos bajo la Denominación de Origen Ribera del Duero.

Desde entonces, la bodega ha sido sinónimo de vinos artesanales de alta calidad, continuando la labor iniciada por sus antecesores en la histórica villa de Peñafalcón, que en el siglo XI daba nombre a esta región.

Tradición familiar con más de 300 años de historia

Nuestra bodega es el resultado de una tradición familiar que se remonta a los siglos XVII

Vinos artesanales y ecológicos

En Bodegas Peñafalcón, producimos vinos ecológicos utilizando métodos artesanales y tradicionales que respetan la naturaleza

Reconocimiento internacional y premios de gran prestigio

Nuestros vinos han sido galardonados con más de 56 premios internacionales, incluyendo medallas Gran Oro y Oro

La filosofía de Peñafalcón: Respeto por la tierra y el vino

En Bodegas Peñafalcón, nuestra filosofía se basa en un profundo respeto por la tierra y un compromiso con la producción de vinos ecológicos y de calidad excepcional. A través de prácticas agrícolas tradicionales, evitamos el uso de herbicidas y fertilizantes químicos.

Realizamos un cuidadoso trabajo manual en los viñedos, desde la poda hasta la recolección de la uva, respetando siempre el ciclo natural de la vid. Los viñedos, ubicados en las privilegiadas laderas calcáreas de Peñafiel, favorecen la maduración óptima de la uva, asegurando que cada botella de vino que producimos sea un reflejo de nuestra tierra, nuestro compromiso y nuestra pasión por el vino.

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Quienes somos, Quienes somos, Maria Jose Arranz Gil

El nombre Peñafalcón: Una historia de fortaleza y tradición

El nombre de nuestra bodega, Peñafalcón, tiene un origen histórico profundamente ligado a la región de Peñafiel. En el siglo XI, la villa era conocida como Peñafalcón, un nombre que hace referencia a una roca o peña con un halcón posado, símbolo de la fortaleza y la majestuosidad de la región.

Según la famosa Crónica rimada del Cid, el Cid Campeador conquistó Peñafalcón, cambiando su nombre a Peñafiel en honor a la victoria.

Rendir homenaje a esta historia es parte de nuestra identidad y nos llena de orgullo el portar este nombre tan significativo en la creación de nuestros vinos.